Novela para captar lectores

El martes por la tarde nos reunimos para hablar de la novela Liquidación final de Petros Márkaris, autor del que ya leímos el curso pasado el libro de cuentos Blakan Blues, que tanto gustó a todos. También esta novela, que forma parte de una trilogía dedicada a la crisis griega, ha sido del agrado de las once personas que participamos en la sesión del club de lectura: tres miembros del alumnado (Laura, Antonio y Esther), cinco del profesorado (Lola, María, Miguel, Carmen y Matías) y tres del sector de los padres y madres (Puri, Toñi y Victoriano).

En la presentación del autor, María, profesora de Filosofía, aclaró que había puesto esta lectura en 1º de Bachillerato, porque la acción de la misma se desarrolla en Grecia, país donde nació esta ciencia, y por las referencias a Sócrates, que fue una de los primeros filósofos.

De Márkaris destacó los siguientes datos biográficos y literarios: se ha especializado en la cultura alemana y ha traducido a autores de esta nacionalidad, como: Goethe, Brecht y Schnitzler; al ser miembro de la minoría armenia, durante muchos años no tuvo ninguna ciudadanía, hasta el restablecimiento de la democracia en 1974 en que obtuvo la griega; y ha escrito otras obras de teatro, guiones cinematográficos y novelas policiacas, protagonizadas por el comisario Jaritos, que han sido traducidas a numerosos idiomas. Finalmente, leyó las palabras en las que Márkaris explica cómo llegó a convertir en protagonista de sus obras a este personaje: «Como fui por largo tiempo un activista de izquierda, no tenía ninguna simpatía por los policías. En Grecia, habían sido sinónimo de fascistas… Pero de pronto, por primera vez, caí en la cuenta de que esos pobres policías son pequeños burgueses, que tienen los mismos sueños de que sus hijos puedan estudiar para convertirse en doctores o abogados. Así se comenzó a desarrollar esta construcción: un crimen y una historia familiar contadas paralelamente».

En el turno de opiniones, hubo coincidencia en considerar Liquidación final como un novela de fácil lectura que consigue enganchar al lector, sobre todo a partir del momento en que se comete el primer crimen. No obstante, se pusieron algunas objeciones: para los alumnos el desenlace no es creíble, porque la psicóloga que da las claves para resolver el caso, es un personaje un tanto artificial del que no sabemos nada hasta ese momento; y para las madres las referencias a las calles y avenidas de Atenas resultan excesivas y tediosas de leer. Miguel, que asistió por primera vez al club de lectura, explicó que la psicóloga es como el “deus ex machina” de la tragedia griega, que aparece en un momento determinado para resolver el conflicto; y que la insistencia en citar las calles de la capital griega obedece al protagonismo de esta y sus habitantes afectados por la crisis. Añadió que quizá Márkaris, al que había escuchado en una conferencia explicar cómo escribía sus novelas policiacas, en esta desvía la atención hacia Merenditis, responsable del Cerámico, donde se halla la primera víctima, cuando en realidad el asesino es Nasiotis, que graba los  vídeos del recinto arqueológico. Carmen comentó que, a diferencia de Balkan Blues, la novela protagonizada por Jaritos aportaba poco desde el punto de vista literario, aunque era idónea para iniciar en la lectura a los alumnos, por su sencillez, y les permitía, además, conocer la situación de un país en crisis, como Grecia.

Laura y Antonio valoraron positivamente el punto de vista del narrador protagonista, porque hacía más creíbles los hechos que cuenta, al haber sido vividos por él, tanto los referidos a la investigación policial, como a los de su propia vida personal.

Estos últimos, con el problema de Katerina, que decide irse a trabajar a un país africano, se resuelven gracias a la intervención de Zisis, un viejo militante comunista que le viene a decir que su lugar está en Grecia. Victoriano apuntó, en este sentido, que las resistencias del comisario y su mujer a que la hija de ambos vaya a trabajar a África, probablemente no se habrían dado, si el país de destino hubiese sido Estados Unidos.

Analizando a Jaritos, mencionamos que sus consultas al diccionario le ayudaban tanto a resolver los problemas que se le presentaban en la investigación policial, como los que surgían en su familia. También se mencionó su inteligencia y su sentido del humor , éste último característico de los ciudadanos del sur de Europa.

María les propuso a los alumnos que eligieran cada uno de ellos el personaje que más les había gustado: Antonio optó por Nisis, porque logra convencer a Katerina de que se quede viviendo en Grecia; Esther eligió a Kula, la ayudante de Jaritos, que siempre acaba descubriendo en Internet alguna pista para avanzar en la investigación; y Laura se quedó con Katerina, porque le recordaba a ella misma con sus dudas y, al mismo tiempo, su seguridad para tomar decisiones.

Sobre la situación de crisis por la que atraviesa Grecia, que se refleja en la novela, comentamos las similitudes con España: el suicidio de las cuatro mujeres jubiladas, a causa de la desesperación, es similar a otros que se han producido en nuestro país; las protestas en las calles de Atenas contra las medidas restrictivas del gobierno también han tenido lugar aquí; los empresarios corruptos y defraudadores de Hacienda, que ubican sus empresas fuera de Grecia y hacen transferencias inferiores a 10.000 euros para blanquear dinero, igualmente los encontramos en España; el periodismo que busca, por encima de la información objetiva, impresionar al lector se da en todos los países, incluido el nuestro; la hipocresía de empresarios, como Langusis, que afirman pagar sus impuestos para salvar a Grecia, podemos reconocerla en las actitudes populistas de constructores metidos a políticos, como Sandokán; etc.

También se pueden establecer paralelismos entre Grecia y España en la convicción de que estamos perdiendo, porque carecen de trabajo, una generación de jóvenes, probablemente la mejor preparada que hayamos tenido nunca, y en los comentarios despectivos, algunos no carentes de humor, sobre los funcionarios:

  • “En el sector público del país los buenos hacen siempre el primo”.
  • “Somos la televisión nacional, señor director. Si algo nos sobra, son los ociosos”.
  • “Al final me convencerá de que la única manera de conseguir un ascenso en la administración griega es no hace nada”.
  • “Si cada griego que ha topado con la burocracia se hubiera puesto a matar, ya habríamos perdido la mitad de la población griega”.

Llegamos a la conclusión de que Liquidación final es una novela, como dijo Carmen, idónea, por su sencillez, por su trama policiaca y por su trascendencia social, para atraer a los alumnos al club de lectura, aunque a los lectores más avezados nos haya resultado de una calidad literaria discutible.

Próxima lectura, a propuesta de Puri, El lector de Julio Verne de Almudena Grandes. Compraremos algún ejemplar impreso para la biblioteca, aunque también se puede leer en Internet.

Hablaremos de esta novela el martes, 10 de diciembre, a las 18 h.

Guión sobre «Liquidación final»

Guión para la sesión del club de  lectura

(5 de noviembre, martes, a las 18 horas)

  1. Presentación del autor.
  2. Opinión breve sobre la novela: si nos ha gustado o no, explicando brevemente el motivo.
  3. Título: ¿nos parece acertado?
  4. Espacio: ¿en qué lugar se desarrollan los hechos?, ¿por qué cita con tanto detalle las calles y avenidas por donde pasa el protagonista?
  5. Tiempo:

5.1.        Tiempo histórico: ¿en qué momento histórico de la historia de Grecia transcurre la novela?

5.2.        Tiempo de los hechos que se cuentan: ¿cuánto dura la investigación policial?

6. Punto de vista: ¿desde qué punto de vista se cuentan los hechos?. ¿nos parece el adecuado?, ¿qué ventajas e inconvenientes le ves?

7. Estructura:

7.1.        Estructura externa: ¿cómo se estructura formalmente la novela?,

7.2.        Estructura interna: ¿qué tres partes se distinguen teniendo en cuenta su contenido?, ¿cuántas acciones se desarrollan?, ¿cómo valoramos el final?, ¿es creíble la aparición de la psicóloga para resolver el caso?

8. Intriga: ¿qué mecanismos utiliza para generar la intriga?

9. Personajes:

  • Jaritos
  • Katerina
  • Adrianí
  • Guikas
  • Spiridakis
  • Kula
  • Lambrópulos
  • Dimitriu
  • Ministro de economía
  • Viceministro
  • Sotirópulos
  • Nisis
  • Korasidis
  • Langusis
  • Zisimatos
  • Polátoglu
  • Nasiotis

10. Temas:

10.1.     Crisis económica:

  • Política de recortes
  • Pobreza de la población frente a la riqueza de los empresarios
  • Paro
  • Protestas en las calles
  • Xenofobia

10.2.     Sentimientos:

  • Desesperación
  • Suicidio
  • Hipocresía

10.3.     Política: ¿cómo se manifiesta la corrupción de los políticos?

10.4.     Sindicalismo: ¿cómo es el trabajo de sindicalista?

10.5.     Medios de comunicación: ¿qué tipo de periodismo predomina?

10.6.     Metalenguaje: ¿qué aportan al protagonista sus reflexiones sobre el lenguaje?

11. Frases para la reflexión:

  • En el sector público del país los buenos hacen siempre el primo (23)
  • Ojos que no ven corazón que no siente (61)
  • Si fuéramos por ahí cargándonos a los que defraudan al fisco, la población de Grecia quedaría reducida a los empleados públicos, a los asalariados privados, a los desempleados y a las amas de casa (74)
  • La visita cuesta cien euros, pero si quiere factura, le costará ciento cincuenta (88)
  • En una democracia la evasión de impuestos es un derecho legítimo de los contribuyentes (123)
  • Somos la televisión nacional, señor director. Si algo nos sobra, son los ociosos. (136)
  • Es preferible tener a un asesino suelto que a un héroe popular en la cárcel (199)
  • Al final me convencerá de que la única manera de conseguir un ascenso en la administración griega es no hace nada (201)
  • Una cosa es que ella critique y acuse a su hija, y otra muy distinta que la critiquen y la acusen los demás (204)
  • Las reacciones más inútiles son fruto de la desesperación, pero también de la desesperación nacen las soluciones más eficaces (217)
  • La palabras son plata, el silencio oro (295)
  • Este país no puede permitirse otra generación perdida (307)
  • Si cada griego que ha topado con la burocracia se hubiera puesto a matar, ya habríamos perdido la mitad de la población griega (323)

12. Estilo: ¿en qué lenguaje está escrita la novela?, ¿cómo se manifiesta el sentido del humor?

Actualidad de Poe

El pasado martes celebramos la primera sesión del club de lectura del curso 2013/14, a la que asistimos: dos profesores, dos madres y cinco profesoras, para hablar de cinco relatos de Edgar Allan Poe. Lástima que los alumnos no se animaran a participar en la actividad, a pesar de haberse anunciado en las clases, particularmente en las de 4º de ESO, donde estamos leyendo, durante el primer trimestre, estos textos del escritor norteamericano.

La presentación de Poe, cuidadosa y prolija, corrió a cargo de María Sanjuán, quien destacó hechos lamentables de su vida, que quizá explican su tendencia a la depresión: el fallecimiento de sus padres, a causa de la tuberculosis, cuando él era un niño; las pésimas relaciones con el padre adoptivo, que acabó desheredándole; el alcoholismo crónico y la afición a las drogas que provocaron su expulsión, primero, de la Universidad de Charlottesville y, después, de la famosa academia militar de West-Point; los intentos infructuosos de crear su propia revista; el fallecimiento prematuro de su joven mujer, también a causa de la tuberculosis; y su propia muerte, cuando tan sólo contaba 38 años, bajo los efectos del “delirium tremens”. Pero también mencionó aspectos positivos del autor como: su facilidad para el aprendizaje de las lenguas clásicas, que provocó la admiración de compañeros y profesores de universidad; su aguda inteligencia; y sobre todo el estilo cáustico y elegante, como escritor, que mereció el reconocimiento de sus colegas y que lo han convertido en una de las figuras más importantes de la literatura universal.

En el turno de opiniones sobre los relatos, hubo casi unanimidad en valorar la actualidad de los mismos, a pesar de haber transcurrido casi 200 años desde que fueron escritos. Igualmente, se destacó su extraordinaria capacidad  para describir lugares y ambientes, sugiriendo mucho más que lo que dice, con lo que consigue crear la tensión del lector y dar verosimilitud a las historias que cuenta. La excepción, en este sentido, la constituyó Lola a quien la lectura de los relatos no había interesado tanto como a los demás, a causa sobre todo de la omnipresencia del mal y de los aspectos negativos de la condición humana. Antonio comentó que, para leer a Poe, había que tener una cierta predisposición para enfrentarse a la literatura de terror psicológico que cultiva.

Entre los relatos, habían gustado especialmente, sobre todo a Puri y Toñi, “El gato negro” y “El corazón delator”, que tienen una serie de aspectos en común:

  • Los dos protagonistas advierten, al principio, de que no están locos.
  • Cometen crímenes horribles y ocultan los cadáveres cuidadosamente.
  • Ellos mismos acaban delatándose a la policía.
  • Aparecen los temas de la locura, la maldad y el sentimiento de culpa.

Los protagonistas de ambos relatos, caracterizados por su comportamiento maligno, nos llevaron a reflexionar e intercambiar opiniones sobre la presencia del mal en la naturaleza humana. Unos entendíamos que sí forma parte, como contrapunto del bien, como los conceptos del yin y el yang, que según el taoísmo exponen la dualidad de todo lo existente en el universo. Así, lo entendía Carmen. Para otros, en cambio, como Pepa, hay que hablar más de la presencia de instintos agresivos, que de maldad, pues esta implica intencionalidad.

¿Qué mueve al protagonista de “El gato negro a actuar de modo tan violento?, nos preguntamos.

La  respuesta fue que no sólo el alcohol sino también su propio pasado, especialmente la niñez, en la que fue objeto de bromas por parte de sus compañeros, a causa de «la docilidad y humanidad de su carácter». Para Ana este personaje no es nada inteligente y responde al perfil de hombre maltratador, tan presente en la sociedad actual.

¿Cómo se comportan estos seres malignos, después de cometer sus crímenes?, seguimos planteándonos.

Acaba remordiéndoles la conciencia, y el protagonista de “El corazón delator la calma delatándose ante la policía y el de “El gato negro” contando su historia, el día antes de ser ajusticiado: “mañana voy a morir y quisiera aliviar hoy mi apenado espíritu. Deseo mostrar al mundo, clara y concretamente, una serie de simples acontecimientos domésticos que, por sus consecuencias, me han aterrorizado, torturado y anonadado”.

Antonio comentó que en los dos personajes puede haber un reflejo del propio Edgar Allan Poe y en sus víctimas un reflejo de los padres de éste, principalmente del padre adoptivo con el que tuvo unas relaciones muy tensas. El subconsciente -naturalmente nos referimos al del escritor norteamericano-, quizá le jugó una mala pasada o simplemente cumplió su función de dar salida periódica a las frustraciones que se acumulan en él.

Coincidimos en que el más terrible y sobrecogedor de todos los relatos es “El pozo y el péndulo”, por su estructura “in media res”, que nos sitúa desde el principio en un momento dramático de la vida del protagonista, sentenciado a la pena máxima por el Tribunal de la Inquisición; y porque Poe acierta a describir con maestría los diferentes métodos de tortura y de muerte y consigue que el miedo del personaje se convierta primero en terror y después en pánico, sensaciones que acabamos experimentando también los lectores. Es lo que se denomina terror psicológico. No obstante, el final, por el que se preguntaba Toñi, con la aparición repentina del general francés que salva al preso, nos pareció un tanto impostado.

De “Los crímenes de la calle Morgue” elogiamos el minucioso proceso de investigación llevado a cabo por Auguste Dupin, que servirá de inspiración a otros autores de novela policiaca; su capacidad para fijarse en los pequeños detalles, que normalmente pasan inadvertidos, con el fin de descubrir al culpable de los crímenes. El propio Dupin lo resume en un pasaje, que le había gustado particularmente a Lola: “Vidoc –se refiere a un inspector de policía que ha estudiado el caso sin éxito- era un buen adivinador y hombre perseverante. Pero, como no tenía educada la inteligencia, se descarriaba constantemente, por la misma intensidad de sus investigaciones. Menoscaba su visión por mirar el objeto tan de cerca. Era capaz de ver acaso una o dos circunstancias con desusada claridad, pero al hacerlo necesariamente perdía la visión total del asunto. Puede decirse que ese es el defecto de ser demasiado profundo. La verdad no siempre está dentro del pozo. En realidad, en cuanto a lo que más importa conocer, yo pienso que es invariablemente superficial. La profundidad está en los valles donde la buscamos, pero no en las cimas de las montañas desde donde la descubrimos.”.

Hablamos de la simbología de la historia que se cuenta en “Manuscrito hallado en una botella”. Se barajaron dos hipótesis tratando de interpretarla: que representa la vida humana la cual inexorablemente acaba en la muerte, como sosteníamos unos, o la leyenda del holandés errante que fue condenado a navegar por los mares eternamente, como apuntaron Puri y Pepa. Esta última llamó la atención igualmente sobre la ausencia casi total de mujeres en los relatos de Poe y cómo las pocas que parecen acaban asesinadas. Sin duda es un reflejo del papel secundario y subordinado al hombre, que tradicionalmente ha desempeñado la mujer.

Finalmente, comentamos los elementos comunes a todos los relatos:

  • El punto de vista de narrador protagonista, que les da verosimilitud.
  • El tema de la muerte y los terrores que invaden al ser humano (el sufrimiento y sus posibles causas: torturas, fantasmas, oscuridad).
  • Que son relatos “autorreflexivos”, en los que el autor, a través del narrador protagonista medita y razona sobre ideas (cualidades que se necesitan para jugar al ajedrez y a las damas) o sobre sí mismo (su afición a la filosofía, el retorno a la vida del desvanecimiento y su estado físico, la cordura con que es capaz de contar la historia).
  • La descripción de  ambientes y lugares para crear el clima de terror y para sugerir lo que va a suceder.
  • Y por supuesto la actualidad de los mismos, a pesar de los años transcurridos.

Próxima lectura: Liquidación total de Petros Markaris, autor del que ya leímos un libro de relatos el curso pasado. Hablaremos sobre esta novela el martes, 5 de noviembre, a las 18 horas, en la biblioteca, como siempre.

Club de lectura. Curso 2013/14

PRIMERA SESIÓN DEL CLUB DE LECTURA

CURSO DEL CURSO 2013/14

IES GRAN CAPITÁN

(Martes, 1 de octubre, a las 18 horas, en la biblioteca)

SELECCIÓN DE RELATOS

Edgar Allan Poe

GUIÓN PARA EL DEBATE

EL AUTOR

Presentación de Edgar Allan Poe: vida, movimiento literario al que pertenece, etc.

LOS RELATOS

¿Qué tienen en común?

¿Cómo se manifiestan las que para Poe eran características principales de un buen relato: imaginación, originalidad y verosimilitud?

¿Dónde se sitúa la causa de terror? ¿En el exterior de los personajes o en su interior?

Crímenes de la calle Morgue

¿Consideras necesaria la introducción al relato?

¿Qué diferentes cualidades deben tener un jugador de ajedrez y uno de damas? ¿Estás de acuerdo con el planteamiento?

¿Desde qué punto de vista se cuenta la historia? ¿Te parece el adecuado?

¿Cuál es su estructura?

¿Qué indicios le permiten dar con el culpable?

¿Qué opinas sobre el desenlace? ¿Te parece fantástico o realista?

¿Cómo se mantiene la intriga?

Por este relato se considera a Poe como el primer novelista policiaco. ¿Por qué?

Manuscrito hallado en una botella

¿Por qué el título?

¿Desde qué punto de vista se cuentan los hechos?

¿Cuál es la estructura del relato?

¿Coinciden el tiempo interno de la narración con el tiempo externo?

En el mar ha aparecido de pronto un gran buque fantasmagórico. ¿Crees que es algo real o es fruto de la imaginación o la locura del protagonista? ¿Por qué?

¿En qué tipo de lengua está escrito el relato?

¿Qué interesa más: la historia que se cuenta o  la atmósfera terrible que logra crear Poe?

El pozo y el péndulo

¿Por qué el título? ¿Se te ocurre otro mejor?

¿En qué consiste la estructura in media res de este relato?

Al hereje se le ocurre la idea de untarse con el aceite de la carne para que las ratas se comieran sus ataduras y así librarse del péndulo. ¿Se te hubiera ocurrido a ti otra forma de hacerlo?

¿Qué características de la política de la Inquisición se pueden observar en este relato?

¿Qué opinas del desenlace?

El corazón delator

¿Desde qué punto de vista se cuenta la historia? ¿Te parece el adecuado? ¿Por qué?

¿Por qué dice el protagonista que no puede estar loco?

¿Por qué decide matar al viejo?

¿Qué precauciones toma para esconder el cadáver?

¿Qué relación tiene el título del cuento con el desenlace?

¿Cómo interpretas éste último?

¿Cómo se manifiestan los temas de la locura, la culpa y la maldad?

¿A qué figura familiar de Edgar Allan Poe puede representar el viejo del relato?

El gato negro

¿Qué opinas de la creencia popular que considera a todos los gatos negros como animales que dan mala suerte?

¿Qué consecuencias tiene el cambio de carácter del protagonista?

¿Por qué se produce el cambio? ¿Comprendemos la causa?

¿Por qué ahorca al gato?

¿Qué simboliza la imagen de la horca que parece en la mancha blanca del segundo gato?

¿Cómo finaliza “El gato negro”?

¿Cómo se reflejan en el relato los siguientes temas: la locura, la maldad y la culpa?

¿Qué paralelismos se pueden establecer entre este relato y el titulado “El corazón delator”?

Primera sesión del curso 2013-14

La primera sesión del club de lectura del curso 2013-14 tendrá lugar el martes, 1 de octubre, a las 18 horas, en la biblioteca. Hablaremos sobre cuatro relatos de Edgar Allan Poe:

  • El corazón delator
  • El pozo y el péndulo
  • Los crímenes de la calle Morgue
  • Manuscrito hallado en una botella
  • El gato negro

Podéis encontrarlos, junto con otros relatos, en esta dirección.

Los relatos que hemos seleccionado garantizan intriga, porque Allan Poe es un auténtico maestro en generarla. Los mismos títulos ya suscitan una cierta inquietud. Os esperamos, porque el club de lectura está pensado para toda la comunidad educativa, en especial para el alumnado.

El talento de Patricia Highsmith

De nuevo, a causa de los exámenes y sobre todo la preparación de las pruebas de selectividad, no pudimos contar el pasado martes, en la sesión del club de lectura, con los alumnos, cuando los de Literatura Universal podían haber tenido un protagonismo especial.

María presentó a la autora mencionando algunos datos de su biografía: la separación de sus padres antes de que naciese; la mala relación con su madre y su padrastro; el descubrimiento de su homosexualidad a los veinticinco años; su temprana vocación literaria; el salto a la fama con la adaptación cinematográfica de su primera novela, Extraños en un tren, por Alfred Hitchcock; su fascinación por las personas afligidas por enfermedades mentales; sus ideas políticas contrarias al ideal del “sueño americano”; su alcoholismo, que vemos reflejado en el consumo casi compulsivo de Martinis en El talento de Mr. Ripley; etc.

Desde un principio, nos centramos en el protagonista, Tom Ripley, porque su presencia, tanto física, por su tendencia a disfrazarse y hacer imitaciones, como mental, por su desequilibrio y al mismo tiempo frialdad con la que ejecuta sus planes, impregna toda la novela.

Coincidimos en que el principio de esta nos había intrigado a todos, con la aparente persecución del protagonista por parte de mister Greenleaf, quien le encargará la búsqueda de su hijo que se encuentra en Italia. Le sigue una parte más anodina, y de menor interés para el lector, cuando localiza a Dickie que vive con Marge y pasa con ellos un tiempo, durante el cual entablan amistad. Sin embargo, la novela levanta el vuelo, a medida que la relación entre los tres jóvenes se torna compleja y turbadora; y nos atrapa definitivamente a partir del primer crimen cometido por Tom, hasta el final sorprendente.

Las preguntas sobre el asesino surgieron inmediatamente:

  • ¿Qué le mueve a actuar de esta extraña manera?
  • ¿Resulta creíble su comportamiento?
  • ¿Qué tipo de atracción siente hacia Dickie?

La respuesta a la primera pregunta nos llevó a analizar la frustración de Tom Ripley, que se remonta a su infancia desgraciada, criado por un tía que lo trataba con desprecio: “eres tan mariquita como tu padre” le decía. Probablemente, esta experiencia traumática, similar a la de la propia autora, Patricia  Highsmith, lo marcó hasta convertirlo en un ser desorientado y con dudas sobre su propia personalidad. Por eso, quiere apropiarse de la de Dickie, a quien envidia su pertenencia a un grupo social y su capacidad para caer bien a los demás.

Podría haberle bastado con disfrutar de la amistad de éste, como el mismo reconoce al final de la novela:

“Nada de todo aquello hubiese sucedidos si él se hubiese dedicado a viajar solo, si no hubiese sido tan ambicioso e impaciente, si no hubiese malinterpretado como un estúpido la relación entre Dickie y Marge, esperando simplemente a que se separasen por propia voluntad. Hubiera podido seguir viviendo con Dickie el resto de su vida hasta el fin de sus días. Si aquel día no lo hubiera dado por ponerse las ropas de Dickie…”

Este hecho, probarse las ropas de su amigo, condiciona la relación entre ambos que, desde ese momento, se vuelve desconfiada, sobre todo por parte de Dickie, que sospecha de la homosexualidad de Tom; y desencadena el primer crimen.

Sobre el segundo crimen, hubo discrepancias en cuanto a alguna circunstancia del mismo: si la precipitación con la que Fredy sube las escaleras, momentos antes de ser asesinado, se debe a que tiene la sospecha de que Tom está suplantando a Dickie y le ha podido causar algún daño, o a otro motivo.

Sobre si el comportamiento del protagonista era creíble, hubo también diferentes opiniones: para unos, como Antonio, sí lo era, teniendo en cuenta la evolución del personaje, desde la infancia difícil, pasando por el rencor hacia los que no terminan de aceptarlo, hasta los crímenes que comete; para otros, en cambio no, por la sensación de extrañeza que produce en el lector, que se ve incrementada por el estilo indirecto libre empleado por Highsmith, para reproducir los pensamientos del mismo. Este procedimiento, usado también por Clarín en La Regenta, resta cercanía al personaje, lo aleja de nosotros, aunque proporciona objetividad a sus actos.

Tampoco estuvimos de acuerdo en el tipo de atracción que sentía hacia Dickie, pues unos, como Lola o Victoriano, pensaban que había indicios suficientes que demostraban su homosexualidad, aunque no se manifieste explícitamente en ningún momento; mientras que otros veían a Tom Ripley como un personaje asexuado, que establece con su amigo una relación, que en algún momento, es de dependencia mutua.

Sí coincidimos en que Patricia Highsmith apenas profundiza en el resto de los personajes, ya que ni siquiera Dickie o Marge muestran complejidad suficiente como para considerarlos redondos; casi se podría asegurar lo contrario: que son personajes previsibles.

Muy interesantes fueron las aportaciones de Carmen, que había analizado la novela con sus alumnos de Literatura Universal: la impresión positiva que les había causado a estos; el original punto de vista desde el que se cuenta la historia: un narrador omnisciente, que no juzga a los personajes, pero que lo sabe todo con respecto a ellos, en especial sobre el tortuoso mundo interior de Tom Ripley, hasta el extremo de que tenemos la impresión de que todo lo ve con los ojos de éste; la linealidad de la historia, aunque, en ocasiones, se producen salto atrás (analepsis) como, por ejemplo, cuando el protagonista recuerda su infancia; etc.

Concluimos la sesión elogiando el estilo sobrio y conciso, sin apenas figuras retóricas, utilizado por Patricia Highsmith, que es el que mejor se ajusta al estudio psicológico del protagonista, a la descripción de los motivos que le impulsan a actuar, que acaban generando en el lector una cierta inquietud.

Originales, comprometidos, universales

Estos son los tres adjetivos que mejor definen los relatos de Balkan Blues: originales, comprometidos y universales. Así se consideró ayer en la sesión del club de lectura dedicada al libro de Petros Márkaris, a la que asistimos nueve personas.

Antes de llegar a esta conclusión, María presentó al autor destacando su condición de inmigrante, como lo demuestran dos hechos: que, como miembro de la minoría armenia, careciera de ciudadanía, hasta conseguir la griega, después de la caída de la Dictadura de los Coroneles; y que realizara sus estudios de economía en cuatro países diferentes: Grecia, Turquía, Alemania y Austria. También explicó por qué el comisario Jaritos es el protagonista de sus principales novelas y de algunos de los relatos que se incluyen en Balkan blues: porque, a pesar de su activismo de izquierda, Márkaris cayó en la cuenta “de que esos pobres policías son pequeños burgueses, que tienen los mismos sueños de que sus hijos puedan estudiar para convertirse en doctores o abogados.”

En el turno de opiniones sobre los relatos, hubo coincidencia en valorar positivamente el contenido social de los mismos, uno de los rasgos que los unen, junto con el espacio común de la ciudad de Atenas, que se prepara para las Olimpiadas de 2004. Igualmente, se valoró la originalidad con la que los escribe y resuelve los desenlaces.

Del titulado “De refilón” comentamos que, al convertir las manos y los pies de los personajes en auténticos protagonistas de la historia, transmite la sensación de que no son personas sino mano de obra barata, seres a los que se grita e insulta. Por eso, elige el punto de vista de narrador observador externo para contarla, ya que éste le permite tomar distancia, dada la ausencia casi total de sentimientos. El desenlace no puede ser más desesperanzador: un inmigrante mata a otro por cargar por menos dinero las cajas que estaban destinadas a él.  Márkaris lo cuenta con tanta objetividad que hiere la sensibilidad del lector:

“Sin querer los pies retroceden un paso. Están dispuestos a dar la vuelta y echar a correr, cuando la mano que tiene el cuchillo inicia un movimiento recto muy preciso, con la destreza que confiere el hábito, y lo clava en el otro vientre. (…) El cuchillo vuelve a clavarse, La mano derecha se abre y los billetes caen lentamente al suelo, encima de unas naranjas podridas. La mano que no sostiene el cuchillo baja y recoge el dinero. Los pies dan media vuelta y desaparecen por donde han venido”.

Analizamos cómo en “Suite para flauta y violín” la ruptura entre Christo y Frida se produce por la coincidencia de sus caracteres: orgullosos, seguros de sí mismos, inteligentes y buenos músicos; y cómo la xenofobia se observa en los comentarios despectivos hacia los extranjeros, en este caso los dos músicos albaneses, por parte de los clientes de los bares donde tocan.

Reflexionamos sobre la evolución de la relación entre el dueño del restaurante y el camarero inmigrante en el relato titulado “Sin decorados»: en principio de confianza y amistad, pero después conflictiva, al negarse el primero a compartir el premio de la quiniela que ambos habían rellenado. Y llegamos a la conclusión –un ejemplo del mensaje universal de los relatos- de que este tipo de situaciones no sólo se dan entre inmigrantes sino que son propias de la condición humana. Nos pareció especialmente eficaz el desenlace: cuando el inmigrante, después de haber sido detenido, declara ante la policía lo sucedido, en un salto temporal hacia delante (prolepsis) de gran audacia por parte de Márkaris.

Consideramos que el hecho de que el protagonista mencione a la autora en “Café batido” le resta verosimilitud a la historia; pero se compensa con el punto de vista del narrador protagonista. En este mismo relato, el anuncio desde el principio de que va a la isla para matar a una mujer no hace que disminuya nuestro interés, sino que pretende fijar nuestra atención en el proceso de búsqueda de la víctima, en cómo va a llevar cabo el crimen y en las causas de éste.

Nos resultó sorprendente la evolución de Tatiana: desde la sumisión y los malos tratos por parte del padre hasta su emancipación y la renuncia a su familia, a su patria y a su lengua. Sólo parece moverle el interés, como se aprecia en este diálogo con su padre: “

-“¿Quién eres tú para darme órdenes? –gritó Vasilis, fuera de sí-. Yo he levantado este local con mis propias manos.

-Lo sé –respondió su hija con frialdad.- Por eso, te dejo la mitad. Pero si no aprendes a comportarte, te compraré tu parte y te echaré a la calle.”

Claro que, teniendo en cuenta el trato despótico que había recibido, se puede entender este desafecto hacia su familia.

También llamó nuestra atención la crudeza con la que describe el mundo de la prostitución en “Sonia y Varia”: cómo estas dos mujeres son obligadas a ejercerla por los proxenetas, que les propinan palizas continuas, por motivos nimios. No obstante, esta humillación se ve compensada por el final feliz, gracias a la imprevista intervención del teniente Jaritos que se encarga de hacer justicia.

Uno de los relatos que más había gustado es “Un cuento infantil”, con el que se cierra el libro, del que elogiamos la relación que se establece entre el viejo y la niña negra: la forma en que se inicia esta, porque ambos se necesitan, a causa de la soledad y cómo –en una ironía del destino- la muerte violenta del primero facilita la integración de la segunda en la sociedad griega.

Paradójicamente, finalizamos la sesión hablando del primer relato, Ingleses, franceses, portugueses, del que ponderamos la inteligencia del comisario Jaritos para resolver el enigma de los tres cadáveres, frente a la obsesión por los atentados terroristas del agente americano, imbuido por la psicosis colectiva de la sociedad estadounidense, tras los atentados del 11 de septiembre. El desenlace nos pareció especialmente brillante, pues nada hacía pensar que los muertos procedieran del depósito de cadáveres. Por otra parte, el relato nos permitió constatar que gritar y exaltarse, durante un partido de fútbol, es independiente del nivel cultural de la persona, pues se trata de algo irracional que nos libera de las tensiones de la vida cotidiana, en especial cuando animamos a la selección nacional, tal y como ha sucedido durante los últimos años en nuestro propio país.

En conjunto, un libro, Balkan blues, que dio juego, desde el punto de vista literario, y nos permitió trascender las historias que cuentan los nueve relatos, para hablar de la condición humana:  las reacciones colectivas producto de los triunfos o de los fracasos, las maldades de la globalización, el trato discriminatorio a los inmigrantes, las “bondades” del colonialismo, el tomarnos la justicia por nuestra cuenta, y también la capacidad de las personas para superar situaciones adversas.

Guión para la próxima sesión

GUIÓN PARA EL DEBATE DEL CLUB DE LECTURA

(Martes, día 14 de mayo de 2013, a las 18:30, en la biblioteca)

EL AUTOR

  1. Presentación del autor.

LOS RELATOS

  1. ¿Sobre qué quiere hacernos reflexionar Petros Márkaris? ¿Estás de acuerdo con este tipo de literatura de contenido social?

“Ingleses, franceses y portugueses”

  1. ¿Quién es el narrador? ¿Cuáles son sus características?
  2. La afición desmedida al fútbol ¿es independiente del nivel cultural del aficionado?
  3. ¿Qué diferentes interpretaciones se dan sobre los cadáveres?
  4. ¿Qué elementos tienen en común estos?
  5. ¿Interpretas  el desenlace como sorprendente? ¿Por qué?

“De refilón”

  1. ¿Qué efecto se consigue al convertir las manos y los pies de los personajes en auténticos protagonistas de la historia?
  2. ¿Desde qué punto de vista se cuenta la historia? ¿Crees que está justificado?

10. ¿Cómo se manifiesta la globalización?

11. ¿Cómo finaliza el relato? ¿Qué causas explican este final?

“La emancipación de Tatiana”

12. ¿Cómo evoluciona el personaje de Tatiana?

13. ¿Puede convertirse la familia en un obstáculo para lograr la emancipación?

“Café batido”

14. Que el protagonista aluda a quién escribe la historia ¿le resta verosimilitud a esta?

15.  El anuncio desde el principio que va a la isla para matar a una mujer ¿hace que disminuya nuestro interés?

16. ¿Cómo acaba el relato?

“Suite para flauta y violín”

17. ¿Cómo es Christo? ¿Y Frida? ¿Por qué rompen?

18. ¿En qué pasajes se reconoce la xenofobia? ¿Y la discriminación de los inmigrantes?

19. ¿Cómo finaliza el relato?

“Sin decorados”

20. ¿Cómo evoluciona la relación entre el dueño del restaurante y el camarero inmigrante? ¿Por qué?

21. ¿Cómo se plantea el tema del colonialismo?

22. ¿Por qué el título?

23. ¿Cómo se cuenta el final? ¿Te parece eficaz?

“Carta verde”

24. ¿Por qué finge Basilis que es serbio cuando en realidad es griego?

25. ¿Por qué el título?

26. ¿Cómo acaba la historia?

“Sonia y Varia”

27. ¿Desde qué punto de vista se cuenta la historia?

28. ¿Cómo se aborda el tema de la prostitución?

29. ¿Cómo finaliza el relato?

“Un cuento infantil”

30. ¿Cómo es la relación del viejo y la niña negra?

31. ¿Cómo finaliza el relato?

A vueltas con Ibrahim

La sesión del pasado martes es la segunda que dedicamos a esta novela de Eric-Enmanuel Schmitt en el club de lectura. Se enmarca en un proyecto interdisciplinar en el que se han implicado buena parte de los departamentos didácticos del centro, diseñando actividades para el alumnado de 3º de ESO.

En la presentación del autor, destacamos algunos aspectos de su biografía: que ejerció como profesor de Filosofía; que fue un adolescente rebelde con ocasionales ataques de violencia; su precocidad en el oficio de escritor, a partir de los dieciséis años; su afición a la música y, en particular, a la ópera; su incursión en el cine con la película «Odette Toulemonde»; etc.

A todos los asistentes, en torno a veinte, entre los que se encontraban cuatro miembros de la asociación de madres y padres, nos había parecido una novela poco desarrollada, aunque sustanciosa. Lo que más nos había interesado es el proceso de aprendizaje de Momo, que comienza siendo un personaje solitario y desgraciado, como su padre, pero que, poco a poco, gracias a su amistad con el señor Ibrahim, va descubriendo la vida (el valor de una sonrisa: «¡Tachán!: ¡Sonrisa!) y se va abriendo a los demás. Al mismo tiempo, este segundo personaje, de carácter tranquilo y afable, inteligente y observador, parece necesitar a Momo, como al hijo que nunca tuvo.

La relación que se establece entre ambos es sin duda lo mejor de la novela, hasta el punto de que anula a los demás personajes, apenas apuntados por Eric-Enmanuel Schmitt, El padre, por ejemplo, sirve de contrapunto al señor Ibrahim, pues representa lo contrario que éste: el aislamiento, el egoísmo, la depresión, la misantropía. Incapaz de educar a Momo llega a inventarse a un supuesto hermano de éste, Popol, como símbolo de la perfección.

Una de las alumnas, Alba, comentó que le había gustado el final de la novela. Lola abundó en esta misma opinión mencionando el carácter cíclico de esta, pues Momo sustituye al señor Ibrahim:

«Ahora yo soy Momo, el del colmado de la calle Azul, la calle Azul que nos es azul. Para todo el mundo soy el árabe de la esquina.»

El simbolismo del osito de peluche, que le regaló a la prostituta que le inicia en el sexo, lo tuvimos claro desde el principio: el fin de la niñez y la entrada en la edad adulta. También el del mar de la Media Luna Dorada: la muerte, que va buscando el señor Ibrahim. En cambio, el de las flores que se encontraban en el interior del Corán dio lugar a diferentes interpretaciones: algunos pensamos en el propio señor Ibrahim y su mujer fallecida; otros las entendieron como símbolos de la vida frente a los libros, incluso Toñi, una madre, llegó a conjeturar que una de las hojas representaba el amor y la otra la amistad.

Finalmente, coincidimos en lo acertado de muchos de los consejos que da el señor Ibrahim a Momo y que convierten esta novela en un tratado de moralidad:

  • Sonreír es lo que hace feliz a uno.
  • La belleza está en todas partes. Allí donde pongas los ojos.
  • Momo, la ausencia de respuesta es una respuesta.
  • Cuando quieras saber si estás en un lugar de ricos o de pobres, observa las papeleras.
  • Ah, no, por la autopista no, Momo… Las autopistas dicen: pases ustedes, aquí no hay nada que ver.